miércoles, 28 de octubre de 2009

El plan Deferiensia

Estaba pensando en el problema que nos acucia, el de la crisis, el de la clase política corrupta y demás.

Analizaba todas las posibles soluciones al problema y he llegado a las siguientes conclusiones.

Seguir tragando. Mal, no solucionamos nada, retoques, parches y más de lo mismo. Como mucho un cambio de gobierno. Es la que saldrá, pero no se soluciona nada.

Revolución. Peor. Tiros, sangre, bronca y lo peor de todo. Los que controlaran esa revolución acabarían siendo los gobernantes del futuro con sus mismos defectos. Descartado.

Justo aquí ha sido cuando se me ha ocurrido la solución al problema. Es tan simple como efectivo.

Actualmente se tiene un gobierno que se elige cada cuatro años. El gobierno manda durante cuatro años. Hace gastos, crea leyes y ajusta cuentas con el pueblo una vez cada cuatro años. Lo considero extremadamente descontrolado viendo los resultados. Eso es como un chaval que se saca una carrera haciendo un examen cada tres años. Lo que acaba pasando es que el gobierno pierde la percepción de la realidad y acaba gobernando para vete tú a saber quién. Llegado ese punto acabamos metidos en guerras, crisis y corrupción. Se olvidan que ante todo están para cumplir la voluntad del pueblo y n para gobernar al pueblo a su antojo.

Todo es causado por la falta de control a los gobiernos. Para que funcionara esto, el gobierno debería estar continuamente supervisado por el pueblo.

Las dos preguntas clave son:

¿Por qué se elige un gobierno y no gobierna la sociedad en conjunto?

¿Cómo podría gobernar la sociedad en conjunto?

Las dos respuestas están relacionadas. Se elige un gobierno porque es lo que siempre se ha hecho y porque no puede gobernar la sociedad en conjunto, que sería lo legítimo.

Entonces la clave sería conseguir que el pueblo gobernara. No que eligiera a sus gobernantes, que gobernara realmente.

Bien, pues ahí puede estar la solución del problema.

Crear un organismo supervisor de gobierno, que todas las personas con derecho a voto tuvieran poder para aprobar o suspender las acciones de sus gobernantes. Que tuviera la capacidad de proponer leyes, aprobarlas o suspenderlas por votación. Lo que hacen en Moncloa pero que todo el país pudiera votar hablando claro.

Técnicamente es posible, con el DNI electrónico, una contraseña y un ordenador, sería posible hacer referéndums instantáneos. Si se quiere, se puede.

¿Qué hay que aprobar presupuestos? Que lo haga el pueblo ¿Qué hay que hacer un trasvase? Que decida el pueblo ¿Qué hay que subir impuestos? Que lo decida la gente ¿Qué hay que ayudar a los bancos? Que la gente decida si es apropiado.

Ese sería el gobierno que cumpliría la voluntad del pueblo, no otro.

Creo que en un principio sería un follón de cojones, pero con el tiempo se conseguiría que el gobierno estuviera al servicio del pueblo y no al revés.

Creo que se solucionaría el problema.

Si esto existiera se me ocurren dos leyes que seguro que saldrían y solucionarían muchos problemas.

¿Qué os parece?

martes, 27 de octubre de 2009

El día que nos hartemos o yo soy la justicia



Me encanta escuchar a la gente quejarse mientras traga.

Hoy he estado viendo lo de Santa Coloma y me meaba de la risa viendo a la gente celebrando que los encierran.

Ciudadano que acaba de ver su cartilla del banco.

También he escuchado a un montón de gente hablando de una revolución, que si se va a montar un buen pollo, que no van a dejar títere con cabeza, todos sacando el ejemplo de la revolución francesa y demás.

Yo a toda esta gente, solo les quiero decir dos palabras:

Ilusos y fantasmas.

Ilusos porque estos desgraciados se pasarán dos o tres años durmiendo en la cárcel más protegidos que el Papa en Irak. Un par de años y los soltarán, cavarán un agujero del que sacarán una bolsa llena de billetes y vivirán lo que les quede de vida riéndose del mundo, en especial de los gilipollas que les increparon y que pagaron su jubilación. Se nos mean en la cara y vivirán de ello el resto de sus vidas. No seáis ilusos. No veréis más ese dinero que os han quitado en impuestos y estos cerdos vivirán de robaros.

Políticos jubilados. Nunca sueltan el maletín, por si acaso.

Fantasmas porque el día que parezca que puede haber algo parecido a una revolución, subirán los sueldos doscientos euros y bajarán un pelín los tipos de interés. Los mismos capullos que ahora agitan los puños amenazando con matar al que se ponga por delante, correrán como idiotas a un concesionario para comprar un Audi y seguirán igual de empeñados que siempre. De puto culo para llegar a final de mes, pero conducirán un Audi. De hecho todavía se gastarán más en ruedas y cenando fuera, el estado todavía saldrá ganando. Van pelados porque son como son, tragan lo que tragan y se conforman con un quinto cuando se podrían llevar la caja de cervezas.

Banda de niñas dispuestas a dar la bienvenida a Tokyo Hotel. Dispuestas a tragar, vaya.

No lo olvidéis, jamás cambiará nada, porque siempre habrán abuelos en autocar con monjas de guía que votarán al PP, siempre habrán abuelas que dirán que el Felipe es muy bonico y Zapatero también, siempre votarán a las dos bandas de buitres que gobiernan este país guiados por los bancos.

Si protestáis mucho, os darán un caramelo, si protestáis muchísimo, un pastelito, pero jamás os dejarán entrar en la tienda de golosinas con dinero.

Y tragareis.

Como yo y como todos, como siempre ha sido y siempre será.

Patalead lo que queráis, pero tragad.

lunes, 26 de octubre de 2009

Truco o trato


No, no voy a hablar del puto Halloween. Truco o trato es una de esas películas que no te explicas como ha salido directamente en DVD sin pasar por el cine.

Con guiños a Creepshow, la piedra angular del cine de terror en historias cortas, Truco o trato tiene cierta semejanza con el cómic, recurso muy recurrente en los últimos años.

Truco o trato te deja la misma sensación que ir de tapas, pruebas muchas cosas, pero no abusas de ninguna. La película también tiene los defectos de ir de tapas, te quedas con ganas de más de algunas cosas y otras te sobran.

Historias cruzadas de terror que suceden en un par de horas de la noche de Halloween, tocan varios subgéneros del terror con buenos resultados.

Especialmente recomendada para fans de las películas de terror de los ochenta.


jueves, 22 de octubre de 2009

Terceros por la cola


Creo que esta lista resume perfectamente quiénes somos y a donde vamos.

Creo firmemente que es una muestra del ritmo de crecimiento tecnológico de los países que aparecen.

Aunque hay algunos que no aparecen y debería (Rusia es el ejemplo que más me llama la atención, en casa se habla con Moscú por videoconferencia a menudo y tienen unas líneas potentes), es un claro ejemplo de el nivel de robo a la hora de cobrar y de eficiencia a la hora de trabajar.

Los máquinas, como siempre en temas tecnológicos, los japoneses, Corea evolucionando bien y los países de los teléfonos detrás. Francia como economía potente en servicios ahí anda y el resto es lo que hay. Llama la atención el séptimo puesto de Portugal, país que está apostando fuerte por la investigación y desarrollo muy sabiamente.

Después hay una larga lista que ni frío ni calor. Con Alemania me quedo un poco parado, yo allí tenía una línea cojonuda, EEUU tiene un territorio brutal, por lo que la media de servicio no está mal y el precio es bueno.

Después llegan países que son fachas o cuna de pelis porno hasta llegar a la triste antepenúltima posición. El país del Gran hermano, de la Pantoja y los toros. Por detrás solo México, campo de batalla de narcos y Grecia, que parece que aparte del Yogur y el sexo anal, no ofrecen nada más.

Visto esto, no me cabe duda de que futuro nos espera. Todavía hoy nos llaman clientes que nos dicen que no nos pueden enviar un internet cuando hablan de correos electrónicos, que cuando les pides su página web te dicen que no tienen internet y que móvil tampoco por si preguntas. Clientes de gastar veinte mil euros anuales, que no es poca cosa para ser una pyme.

Empresarios de esos que usan caja registradoras y quieren todo en papel, nada de ordenadores, que quieren las grapas rectas, que hablan en pesetas, que cuando se habla de más de un millón soplan y dicen que no, a no ser que sea para comprarse un Audi para ellos. De los de cena y putas, de los del sobre marrón, de los del quédate un rato más que cobras mucho y de los que se la sopla la familia.

Si no fuera suficiente con estos, tenemos a los banqueros, de los malos tenemos a los peores, de los de menos escrúpulos, que tienen a España cogida por los cojones, que ponen a los partidos políticos donde los quieren tener y que se callen o las próximas elecciones se las financiará su puta madre.

Esa es la gente que manda en este país y nuestra lacra.



Estamos jodidos.