Cuidaos de tipos como esteHa sido un curso duro. Este curso me he escapado por los pelos de grandes desastres.
En lo laboral ha sido como cuando en las películas del oeste atan al ladrón y lo arrastran con un caballo por el desierto tragando polvo y pegándose con los cactus.
De salud mierda. Aunque he conseguido dejar de fumar, he acabado conociendo a mis amigas de 10 mg que me facilitan la vida y me acompañarán lo que dura un embarazo. Nueve meses de medio colocón no son mala perspectiva. Si las mezclas con algo de alcohol al final del día se expanden, son una maravilla que te ayuda a dormir del tirón sin pesadillas. Cojonudo. Hoy he estado hablando con mi doctora, una señora mayor enrollada que me ha confirmado que el bajón que pegué fue causado por el estrés mientras separaba a un sudamericano y a un abuelo que se iban a ostiar.
He jurado tomármelo todo de otra manera, pero que no me quite a mis pequeñas amigas. Todavía ahora noto como si a veces me faltara el aire, como si unas manos invisibles me trincaran por el pescuezo y me intentaran ahogar. Cada vez las manos vienen menos, pero aún se dejan caer por aquí.
En lo creativo sigo pensando que ha llegado el momento de escribir algo mas trabajado. Este blog es un buen entrenamiento, pero creo que ha llegado el momento de hacer algo más en serio. Posiblemente lo cuelgue en capítulos en el blog, pero no lo tengo claro. Ya veremos, lo tengo que arrancar estas vacaciones.
Vacaciones que para un servidor hoy empieza.
Volved todos enteros.
